Colegiados en el Exterior: Carlos García Conde nos cuenta su experiencia en Nueva York
Continuamos con las entrevistas realizadas a compañeros que están fuera de nuestras fronteras, para ayudar a aquellos Ingenieros que quieran emprender una carrera profesional en el extranjero o pasar una temporada trabajando fuera de España, para que tengan una visión real de la situación de los Ingenieros en distintos países, difundiendo sus vivencias.
Carlos García Conde, Ingeniero Industrial, colegiado desde Julio 2018 con el Nº 3037 y que actualmente está trabajando como Market Analyst en la Oficina Económica y Comercial de España en Nueva York nos cuenta su experiencia.
¿Qué te llevó a salir de España?
Siempre tuve interés en trabajar fuera de España para conocer otros mercados laborales y mejorar mi conocimiento de idiomas. Ya durante la realización del Máster de Ingeniería Industrial decidí hacer un Erasmus en Helsinki (Finlandia), lo cual fue una experiencia muy enriquecedora.
Además, considero que vivir fuera de España y abordar nuevos mercados ayuda a los ingenieros a ser más proactivos y resolutivos.
¿Cómo fueron tus inicios en Nueva York?
La verdad que fueron complicados. Cuando una persona se traslada a vivir a otro país siempre hay un choque emocional, pero si además esto ocurre durante una pandemia mundial, el impacto es todavía mayor. Hay que enfrentarse a nuevos problemas como cuarentenas, continuas pruebas de diagnóstico, dificultades de entendimiento por el uso de la mascarilla, etc.
Por lo demás todo muy bien, el haber estudiado fuera durante el periodo universitario me ayudó a suavizar los problemas que suelen surgir al cambiar de país, como la barrera cultural o el idioma.
¿Cómo es la situación de la Ingeniería en Nueva York si se compara con España?
La situación de la ingeniería en Estados Unidos es muy complicada porque tiene mucha carga regulatoria y varía según zonas. En el estado de Nueva York, así como en el resto del país, el ingeniero español está bien
valorado porque se considera que tiene una formación de calidad con conocimientos en múltiples disciplinas y muestra una capacidad de desempeño elevada.
Actualmente hay muchas oportunidades laborales en el sector de la ingeniería en Nueva York en industrias tales como energías renovables, infraestructuras o automatización.
Además, según informes recientes del Consejo Nacional de las Ciencias de Estados Unidos, el mercado americano depende cada vez más de científicos e ingenieros extranjeros, por lo que es un buen momento para plantearse buscar oportunidades laborales aquí.
¿Qué consejo darías a los ingenieros que buscan cumplir sus objetivos en el extranjero?
Muchas veces esperamos el momento perfecto para tomar la decisión de desplazarnos a otro país y lo vamos posponiendo. Mi consejo es ser un poco impulsivos en este tema. Un aspecto que puede ayudar a inclinar la balanza es contactar con otros españoles que ya estén viviendo en el país de destino y que seguro estarán encantados de echarnos una mano.
También creo que a la hora de mudarse es recomendable tener una buena base de idiomas y un conocimiento previo de la cultura del país.