César Enrique Themudo Goday, nuevo delegado en A Coruña
La Delegación de A Coruña es la única que ha celebrado elecciones en estos últimos comicios, al ser la única sede en la que concurrieron más de una candidatura. Después de las elecciones celebradas el pasado mes de noviembre, los colegiados han elegido la candidatura encabezada por César Enrique Themudo Goday, que el próximo 10 de diciembre tomará posesión de su cargo en la Asamblea General del Colegio. En la Delegación estará acompañado por Jesús Manuel Giz Novo y Juan Carlos Carral Couce, como vocales.
Finalmente, el puesto de subdelegado ha quedado desierto. La razón es que los comicios depararon un empate en número de votos entre Rubén Suárez-Torga Martínez (colegiado 2.380) y Antonio Trincado Sánchez (colegiado 401). En caso de empate, los estatutos establecen que el ganador será el colegiado más antiguo, en este caso Trincado Sánchez, quien ha optado por presentar su dimisión irrevocable al puesto. Esto supone que el puesto de subdelegado quedará desierto hasta unas próximas elecciones.
No pocos políticos deberían tomar nota de las palabras de César Enrique Themudo, quien asegura que «nuestros objetivos pasan por cumplir los puntos que se nombraban en nuestro programa electoral y que estaban ordenados por importancia». Eso sí, en primer lugar desea tener unas palabras de agradecimiento para toda la Junta saliente y, en concreto, a José Manuel Hermida-Cachalvite Mangana quien «dedicó muchas horas a la Delegación cuando ningún otro quería presentarse a Delegado y no se sabía quién iba a coger las riendas. Es un trabajo que hay que agradecer».
Analizando su programa electoral, César Enrique Themudo señala la existencia de «lagunas en la formación e información que el Colegio tiene que dar a sus colegiados». Para afrontar este último punto apuesta por aprovechar las nuevas tecnologías y ejemplifica: «algo esencial para los colegiados es que en las próximas elecciones se pueda votar por Internet o habilitar algún tipo de voto electrónico». En cuanto a la formación, reconoce que en la Delegación están cerrando tres líneas de actuación:
1- Charlas pseudo comerciales, tanto sobre legislación como sobre nuevos productos. «Aquí lo que queremos es intentar darles una línea argumental y, a la hora de entregar el diploma de asistencia, demos uno de 20-40 horas y no varios de 1-2 horas», argumenta el delegado herculino.
2- Actividades formativas importantes, que implicarán unos costes para el Colegio y para el colegiado. Un ejemplo sería el Curso de Mantenimiento de 130 horas y 2.000 euros de cuota de inscripción.
3- Cursos intermedios, que incluso pudiese ofrecer algún colegiado especializado en ese tema. Serían unos cursos de entre 40-50 horas.
Reconocimiento social
Otro punto fundamental para la nueva directiva de la Delegación de A Coruña del ICOIIG es el reconocimiento social. Un reconocimiento que pasa en primer lugar por apostar por incrementar las relaciones del Colegio con los distintos organismos públicos existentes en el entorno. «Queremos entablar relaciones con los ayuntamientos de la zona, sobre todo con el de A Coruña. Creemos que podemos firmar convenios con ellos para hacer consultas o ITES», explica Themudo Goday. En este sentido, recuerda que «el problema de no tener estas relaciones no es que nos quedemos estancados, es que vamos hacia atrás. Hay colectivos que nos están quitando competencias y estamos quedando en el olvido», advierte.
Por ello, también da especial importancia a la presencia social del Colegio. «Somos un gremio muy valorado, pero nos están comiendo el terreno. Tenemos que darnos a conocer no sólo a los organismos e instituciones, sino a toda la sociedad en general».
Llamamiento a la participación
Para conseguirlo, César Enrique Themudo hace un llamamiento a la participación de todos los colegiados de A Coruña. «Tenemos en mente crear distintas comisiones de trabajo e invito desde aquí a todos los colegiados a que participen», apunta el delegado herculino. Una de ellas será de Cultura y Formación. La segunda tratará de afrontar la situación de desempleo que sufren algunos colegiados. «Queremos que no sólo tengamos una bolsa de empleo, sino apostar por una búsqueda activa de empleo y ponernos en contacto con empresas que puedan necesitar los servicios de un ingeniero/a industrial para ayudar al colegiado que está en paro», explica Themudo Goday.